La pasión por la Economía ha marcado toda la trayectoria profesional de Antonio Pulido, que se inició hace casi tres décadas. Su condición de economista le ha ido llevando a lo largo del tiempo a diferentes ámbitos profesionales, desde la docencia universitaria a la gestión pública, el mundo de las finanzas y, en los últimos años, a la presidencia de la Fundación Cajasol.

Se siente muy orgulloso de sus raíces cordobesas y muy a gusto en Sevilla, una ciudad a la que llegó como universitario y en la que han nacido sus tres hijos. Su principal empeño en la actualidad es consolidar la Fundación Cajasol como lo que ya es: un gran agente dinamizador de la sociedad andaluza en los más variados ámbitos, de la cultura al emprendimiento, de la formación a la acción social.